viernes, 30 de abril de 2010

Reflexión del Evangelio del 30 de abril de 2010

En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos:
- «Que no tiemble vuestro corazón; creed en Dios y creed también en mí. En la casa de mi Padre hay muchas estancias; si no fuera así, ¿os habría dicho que voy a prepararos sitio? Cuando vaya y os prepare sitio, volveré y os llevaré conmigo, para que donde estoy yo, estéis también vosotros. Y adonde yo voy, ya sabéis el camino.»

Tomás le dice:
- «Señor, no sabemos adónde vas, ¿cómo podemos saber el camino?»

Jesús le responde:
- «Yo soy el camino, y la verdad, y la vida. Nadie va al Padre, sino por mí.»


Este es uno de los fragmentos del Evangelio que más me gustan. El tema de la muerte se trata muy poco en nuestra amada Iglesia, al contrario de tiempos lejanísimos, en los que se amenazaba con el fuego eterno... (aunque esa "amenaza" -mejor, advertencia- siga vigente, por muy callados que se hayan quedado los sacerdotes respecto al tema). Para los que no fueron al funeral de la madre de Carmen, puedo contarles que en la Homilía, el P. J. A. nos habló que no es sano pensar tanto en la muerte si eso nos impide gozar de la vida, de nuestras personas queridas...

Y en este Evangelio, Jesús nos dice en primer lugar que no tengamos miedo ("Que no tiemble nuestro corazón"), que nuestros miedos no nos paralicen. También nos dice "Creed en mi Padre y creed también en mí". Aquí ya se nos muestra como la brújula que nos va a orientar: Creer en Él, no es sólo decir "Creo" es vivir en el Credo que confesamos. Y como buen pedagogo, Jesús nos va calmando y enseñando muy despacito, como a niños pequeños.

Lo primero que nos revela es que todos tenemos sitio en su casa, en la Casa de su Padre. Cuando mi sobrino murió, mi hija me preguntaba que a dónde se lo había llevado la Virgen (yo le había dicho que Ella le había venido a buscar). Yo le respondí que a la Casa de Dios. Que Ella le había preparado una habitación preciosa, muy cerquita de la Suya y de la de Jesús, y que estaría muy feliz allí, porque siempre estaría rodeado de amor y personas maravillosas. Esto la consoló mucho y me dijo "mami, ¿y de qué color me va a pintar a mí la habitación la Virgen?"... su corazón ya no temblaba.

Segundo, "a donde yo voy, ya saben el CAMINO". Vale, para llegar a donde va Él, hay que morir... pero no morir de cualquier forma: primero, a nosotros mismos y también hay que morir "en Él", creyendo en Él, confiando en Él, y para que eso sea así, no sólo debemos estar bautizados y declararnos cristianos, no sólo hay que estar confirmado y declararnos testigos, hemos debido optar por Él, tomando la vida de Jesús como modelo para nuestra vida, y cargando con nuestra cruz, como Él cargó con la suya, dar nuestra vida por los demás como Él la dio por nosotros... sin quejas, con aceptación, con alegría, con nuestra mirada puesta en Él. Ese es para mí el camino. Un camino muy estrechito y difícil de recorrer, porque la opción más sencilla es hacer lo que me viene en gana, incluso pecar, confiando en que Jesús me perdonará...

Jesús también se declara como la VERDAD. Con respecto a esto, a mí me hizo pensar mucho unas palabras de Gloria Polo, cuando ella dice que "si decimos que Dios es nuestro Padre y en algunos temas mentimos (para protegernos, para aparentar...) nuestro padre no puede ser Dios" (y evítenme escribir el nombre de quien sería nuestro padre, que bastante hartita que me tiene). Por eso, teniendo esto siempre presente, aprendemos a ser veraces... cosa muy difícil en este tiempo (otra vez el caminito ancho vs Caminito estrecho).

Por último, Jesús se declara como la VIDA. Él es el alimento para nuestras almas, es la vida de ellas. Morir en Cristo es vivir para Él. Por tanto, optar por Cristo es optar por la vida. Optar por el pecado es optar por la muerte. La Sagrada Eucaristía, es nuestra Comida principal. Recibirla con respeto, adoración y en estado de gracia, es nuestra obligación. Jesús viene a nosotros a nuestra casa... ¿cómo la preparamos para recibirle? ¿tendremos suciedad en los rincones de nuestra alma, bajo los "muebles"...? Estoy segura que la estancia que Él nos está preparando nos hará salir los colores por la vergüenza que nos dará al comparar con la nuestra.

Jesús nos declara de forma muy transparente, que Él quiere que todos nosotros estemos con Él, nos ilusiona preparándonos un sitio en su Casa (en su Corazón). A nosotros, futuros huéspedes, nos corresponde aceptar o declinar esta invitación. Personalmente, yo sí quiero vivir con Él... y espero que nos encontremos todos reunidos en el Amor de su Corazón cuando Él quiera.

Sagrado Corazón de Jesús, en Vos confío.

viernes, 23 de abril de 2010

Feria de abril

Esta madrugada falleció mi tío Paco. Sí, ya sé que era una muerte anunciada, desde que le detectaron aquel tumor en la garganta, con un nombre tan conocido entre los fumadores empedernidos... los que eligen, no sé por qué, no tener calidad de vida en sus últimos días.

Mi tío Paco, que me explicó tan bien la termodinámica en séptimo de EGB, que fui un hacha resolviendo los problemas.

Mi tío Paco, el único que nos daba una propinilla cuando venía a casa a vernos, cuando éramos niños.

Mi tío Paco, con el que hablábamos de Dios, al que respetaba aunque se declaraba no creyente.

Su increencia fue algo extraño para mí. Motivada por un follón en una cofradía de Tenerife, y por la que terminó alejado de Dios, de la Iglesia, de los Curas... Sigo sin enteder qué fue lo que le pasó.

Por su forma de vivir, sus valores (no todos), podría decirse que era un buen cristiano...

Ahora, como buen sevillano, podrían decir que él estará gozando su particular Feria de Abril en el Cielo... yo no me atrevo a decir tanto. Rezo porque Dios, que también es Misericordia, mire más sus buenas obras que la fe que un día dejó de confesar.

Descansa en paz, tío Paco.

domingo, 18 de abril de 2010

CIBER PERSECUCIÓN RELIGIOSA

... Ya me extrañaba a mí que esto tardara tanto tiempo en empezar...

Verás, hace unos pocos días, me llegó un correo que me entristeció mucho. Es de una página que sigo desde hace algo más de año y medio, quizá más. En su correo me comunicaban que "no sabían cómo, pero sus página había desaparecido de la Web". Ahora están trabajando a contrareloj para ponerla de nuevo en marcha.

Hoy, recibo otro correo, comunicándome desde otra página web católica, lo mismo. Ellos tienen más problemas porque mi servidor me informa de que hay programas nocivos instalados en ella (detectores de claves y piratas informáticos) y no me permite el acceso.

Parece ser que la intolerancia religiosa ha llegado a Internet, y se está dedicando a borrar páginas cuyo contenido habla del amor de Dios y de María por sus hijos... a ver qué mal está enseñando... sean hackers o sean vándalos, deberían aprender a ser tolerantes (precisamente la virtud que nos niegan a los que confesamos a Cristo como el Señor).

viernes, 9 de abril de 2010

¡PASCUA! y Divina Misericordia

Un año más, ya está aquí la Pascua. Recordamos con gozo que Jesús ha resucitado, pero aún nos queda en la boca el amargor de su Pasión y Muerte. Este año, ha venido acompañada de la muerte de la madre de un buen amigo y catequista, y no sé si es por el Tiempo Litúrgico, estos acontecimientos se viven desde otro ángulo muchísimo más esperanzador... no sé si también me ha influído el libro de María Vallejo Nájera "Entre el cielo y la tierra", que mientras hacíamos una oración por el alma de esta señora, yo "quería sentir" que su alma estaba entre nosotros, recogiendo nuestras oraciones intercesoras... yo "quería sentir" que en aquel momento sereno se producía la Comunión de los Santos... y en cierta forma lo sentí...

Nuestra fe no nos obliga a estar serenos cuando nuestra alma está triste, hasta Jesús mismo lloró al conocer que su amigo Lázaro había muerto. Lo que nos pide nuestra fe, es que seamos capaces de reponernos y confiar en la Misericordia de Dios.

Y hablando de Misericordia, este domingo, segundo de Pascua, celebraremos un año más la Fiesta de la Divina Misericordia, con indulgencia plenaria a perpetuidad desde el año 2002. La fiesta la intituyó Su Santidad Juan Pablo II, el 5 de mayo de 2000 y el decreto a perpetuidad fue dado el 29 de junio de 2002. Les dejo un par de documentos para que se informen.

Decreto indulgencias Fiesta de la Divina Misericordia

Ideas rápidas sobre las indulgencias

domingo, 4 de abril de 2010

Dos tazas... digo dos grupos

Los que me van siguiendo, saben que yo tengo mi Comunidad de Vida en una parroquia distinta de donde tengo mi Grupo de Acción.

Pues bien, mi segundo párroco (donde tengo mi Grupo de Acción) se toma unas vacaciones y esta mañana se ha ido a Burgos a visitar a su familia, por lo que mañana me esperan dos grupos de padres para mí solita. Me consuela el saber que el tema que van a ver es el mismo, por lo que lo único distinto es que el aforo de padres va a ser mayor. No me incomoda en el sentido del número de padres (ya he estado con el otro grupo un par de veces y como dice el refrán "no hay dos sin tres"), me ha resultado eso sí un tanto precipitado el "enterarme" dos días antes. Por lo menos, él me ha dejado algo de trabajo adelantado, porque quería ponerles a los padres un montaje en el ordenador, para dialogar después.... claro que ni la parroquia, ni yo tenemos portátil. Gracias a que una compañera de esa parroquia tiene uno y me lo presta... Veremos cómo salen las cosas... ya les contaré. Eso sí, los Benditos patrones de mi grupo tienen ahora un pedido especial para mañana... porque son muchos más por los que orar.

NOVENA ROTA: Necesito intérprete

Bueno, hay momentos en los que me planteo "cuánto de corta" puedo llegar a ser, no sé , voy batiendo mis records, y el Viernes Santo, ha sido el mayor de todos.

Empecemos: No sólo fue Viernes Santo, además fue PRIMER VIERNES.

Primera duda: ¿Y la Misa de Abril? No la hay, porque es Viernes Santo.
Segunda duda: ¿Y la novena al Corazón de Jesús?

Esta pregunta compuesta la realicé el pasado mes de marzo y recibí dos respuestas: La primera me la dió un sacerdote con sotana, de esos que al terminar la Misa se sientan ante el Santísimo a orar de su librito un número indeterminado de oraciones. Él me dijo: "No importa, tú ve". Y se sentó en el confesionario donde le esperaba una feligresa.

La segunda la recibí de otro sacerdote, muchísimo más joven, pero de esos que siendo jóvenes, están "al día" en "cosas antiguas": "Como no hay Misa se salta el mes... aunque no sé si vale o no..."

Con estas respuestas aparentemente contradictorias, me quedé todo el mes de marzo. Al final decidí que, bueno, contara o no contara por la no celebración de la Eucaristía, como era Viernes Santo y yo estoy en los Oficios con el coro, la comunión "sí o sí" la iba a recibir. ¿Que cuenta?, genial, ya son ocho primeros viernes. ¿Que no? pues, nada, en Mayo, será el ocho.

Y llegó el Viernes Santo y estando en el coro: en los oficios estuve. Al llegar la comunión me quedé dirigiendo a medio coro, mientras el otro medio iba a comulgar (que al final salió tres cuartas partes del coro y me quedé prestando apoyo al solista con la voz y la guitarra). Tras la primera canción me tocó cantar el solo de la segunda canción de la Comunión (mientras el resto del coro iba a comulgar), y al acabar, ya estaba todo recogido... me dije "bueno, ahora pido la Comunión, cuando recojamos los atriles y los cantos..."

Dios, que me conoce mejor que yo misma, (porque me creó y sabe de qué pasta estoy hecha) se valió de un ensayo del pregón pascual tras los Oficios, con el párroco en su despacho. Allí vi un portaviático encima de su chaqueta... Y NO RECONOCÍ, NI ENTENDÍ EL AVISO...: Ya ves, tenía a un sacerdote a mi lado y un portaviático (vacío) en la misma habitación...(el recordatorio perfecto: "Oye, Noelia, pide la Comunión, no te olvides") ensayamos un par de veces, me fui de procesiones, y al hacer las oraciones de la noche, caí en la cuenta de que era Primer Viernes y que con Misa o sin ella no había comulgado...

Me puse nerviosísima por un fallo tan torpe... no sabía qué pensar. Recordaba las respuestas que me habían dado, y no sabía cuál era la correcta.

Entonces, me dije: "Tranquila, Noelia, vamos a leer el Mensaje del Corazón de Jesús... " (quien no hable consigo mismo que me tire la primera piedra) y ahí, CLARITO, como el agua cristalina de manantial, dice:

"Los que comulgaren por nueve primeros viernes..."

Vale, resalto : "Los que comulgaren" y no los que vayan a Misa y comulguen.

Jesús, sabe que algún año pasará (como este) que el primer viernes de mes coincida con Viernes Santo, y por lo tanto no hay Misa, pero SÍ hay comunión...

Conclusión 1: Señor, Dios. Tú ves que soy corta en estas cosas. Necesito o un intérprete, o más luces. (Sí, de esos intérpretes que te dan un cogotazo, si es necesario, para que te des cuenta de la cosas).
Conclusión 2: La Novena al Corazón de Jesús se ha interrumpido. Por lo que en Mayo, nuevo intento: Comienzo en Mayo y termino en Enero (ya estoy temblando a ver en qué día cae el primer viernes del último mes)
Conclusión 3: Se lo he contado a mi párroco y le he recordado que los que "amenizamos" las Eucaristías con los cantos TAMBIÉN COMULGAMOS. Él me dijo, con su acentillo sevillano: ¿Y por qué no me pediste la Comunión como otras veces?

Y es cierto, pero yo no sé qué me pasa en Semana Santa, que el ajetreo de los cantos, los ensayos, etc, hacen que me olvide de cosas sumamente importantes (como esta) en cuestión de segundos.

En fin, otra novena rota... me da mucha pena porque he estado a punto de lograrlo... es como si estuviera a punto de alcanzar una meta y me cayera a sólo dos pasos de ella: dos comuniones...

Jesús mío, no me rindo. Tú sabes que yo me caigo y me levanto (con más o menos dificultad, pero me levanto). Tú sabes que mi ofrenda no es perfecta, ni lo es mi reparación... yo confío en Ti, porque te vales de todo lo que me rodea para hablarme... lástima que yo no esté en la misma longitud de onda y no te reciba o no te entienda... Ten paciencia conmigo. Lo seguiré intentando hasta que me muera.

Sagrado Corazón de Jesús, en Vos confío.